Editorial
La pandemia de la COVID-19
en el Perú análisis epidemiológico de la segunda ola
The COVID-19 pandemic in Peru: epidemiological analysis of the second
wave
James
Walter Gutiérrez-Tudela1
Luego de la declinación de la primera
ola en el mes de diciembre del año 2020, pero sin llegar a un porcentaje de
casos acumulados de la Covid-19 del 5% (este valor representa el porcentaje de
casos positivos en relación al total de pruebas acumuladas realizadas) ya
que este todavía se mantuvo por encima del 18%, los casos diarios empezaron a
elevarse la segunda quincena del mes de diciembre, haciendo que los contagios
en promedio semanales fueron mayores que el promedio de los dados de alta
semanales.1 Igualmente, el porcentaje de crecimiento que durante el mes de
diciembre había bajado a 0,14% en promedio semanal y luego empezó a aumentar,
pero sin llegar en esta oportunidad siquiera al 1% en promedio semanal (cifra
que representa los contagios de un día en comparación con los contagios
acumuladas hasta el día anterior) en comparación con más del 20% en promedio
semanal que se había alcanzado durante las primeras semanas de la primera ola
el año 2020. Por otro lado, el porcentaje de crecimiento en la segunda ola alcanzó
un máximo de 0,60% en promedio semanal en la semana 54, ésta contada después el
inicio de la pandemia en nuestro país, es decir la cuarta semana del mes de
marzo del año 2021. Posteriormente, este porcentaje de crecimiento fue
disminuyendo por debajo del 0,10% en promedio semanal hasta fines de octubre
del año 2021.
Luego durante el mes de enero del año
2021 hubo un aumento sostenido de los casos o contagios, haciendo que estos fueran en promedio
más elevados que las altas también en promedio. Así durante la semana 43, entre
el 04 y el 10 de enero de este año, los contagios en promedio semanal eran de
2,244 casos diarios y las altas solamente 1, 597 casos diarios, también en
promedio. El promedio o media semanal se calculó sumando los casos durante siete
días y dividiendo el resultado entre 7.2 El mayor promedio semanal se alcanzó durante
la semana 54, entre el 22 y el 28 de marzo, con 9,079 contagios diarios y 8,727
altas diarias en promedio semanal. A partir de la semana 67, entre el 21 y el
27 de Junio, en promedio las altas fueron mayores que
los contagios, tendencia que persistió hasta fines de octubre de este año 2021,
es decir durante los meses de julio, agosto, setiembre y octubre, hasta la
semana 85 post inicio de la pandemia en nuestra patria, siendo la semana del 25
al 31 de octubre en que hubo un promedio diario de 847 contagios y 926 altas.
Es importante mencionar también que,
durante la segunda quincena del mes de diciembre del año 2020, los contagios
acumulados superaron el millón de casos de la infección por el SARS-Cov-2 (1 millón
153 mil casos, el 22 de diciembre) desde que se reportó el primer paciente en el
mes de marzo de este año. Sin embargo, ya se advertía desde hace meses atrás un
subregistro de miles de pacientes infectados por las deficiencias en el sistema
de notificación, habiendo un desfase entre las cifras oficiales que reportaba el
Ministerio de Salud (MINSA) y las Direcciones Regionales de Salud (DIRESA’s), al extremo que estos últimos calculaban el doble
de los casos totales reportados por el MINSA. Teóricamente y haciendo un
ejercicio, se pudo inferir en vista de que el porcentaje de positividad
acumulada en ese momento era del 18,5% (esta cifra en relación al número total
de pruebas acumuladas) y extrapolando a la población en general del Perú de
32’658, 512 habitantes, que el número de casos o contagios acumulados con la infección
por el nuevo coronavirus podría haber superado los 6 millones de casos de
pacientes infectados, es decir casi el triple de casos totales reportados por las
DIRESAS. Este cálculo, vuelvo a repetir, es teórico y no representa la realidad
de los hechos.
Durante la segunda quincena del mes de
marzo del año 2021 y casi durante todo el mes de abril de este año se tuvo el mayor
número de casos o contagios diarios, siendo el día 15 de abril el de mayor valor
con 13 326 contagios, seguido por el día 1 de abril con 12 916 casos y el día
26 de marzo con 11 919 contagios o casos diagnosticados, cifras que no se
habían encontrado durante la primera ola de la actual pandemia. Los casos
positivos de la COVID-19 durante las primeras semanas de la segunda ola, según etapas
de la vida, fueron mayormente en los adultos (entre 30 y 59 años) con una tasa de
ataque de 6,96 y luego los adultos mayores (de 60 años a más) con una tasa de
ataque de 6,56. La tasa de ataque se refiere al número de casos por 100 habitantes.3
Así, el riesgo de enfermarse fue de 49% para los adultos y de 40% para los adultos
mayores. El 51,6% correspondió al sexo masculino y el 48,4% al sexo femenino. Tomando
en cuenta el total de casos acumulados, el mayor porcentaje correspondía a los adultos,
con el 57%, luego los jóvenes (de 18 a 29 años) con un 19%. En tercer lugar, los
adolescentes (de 12 a 17 años) con un 3% y, finalmente, los niños (de 0 a 11 años)
también con un 3%, grupo etario este último en el que hubo un ligero aumento de
casos.
La tasa de ataque
acumulada por macrorregiones
al comienzo de la segunda ola fue en
este orden: primero Lima y Callao, luego el oriente, seguido por el sur, el centro
y el norte. La tasa de ataque acumulada por regiones fue predominantemente para
los departamentos fronterizos y selváticos con menor población.
Así Moquegua estuvo en primer lugar con 8,59; luego, Madre de Dios con 5,54;
Amazonas, con 4,39; Lima, con 4,36; Tacna, con 4,07; Callao, con 3,95; Tumbes, con
3,84; Ucayali con 3,51; Ica con 3,36; Arequipa con 3,31; y, el promedio para el
Perú fue de 3,20. En el pico más alto de la segunda ola, entre los meses de
marzo y abril del año 2021, las regiones con mayores tasas de ataque acumulada
fueron los mismos, pero en este orden: Moquegua con el 11,21; Lima, 7,47; Madre
de Dios 6,62; Callao 6,21; Tacna 5,89; Amazonas
5,40; Tumbes 5,29; Ica 4,54; Ucayali 4,46;
Arequipa 4,35; y, el promedio nacional 4,84.
En cuanto a la mortalidad, recién el día
31 de mayo del presente año, el Sistema Nacional de
Defunciones (SINADEF) del MINSA sinceró las cifras que se suponía eran las
reales, pasando de 69 342 decesos totales a la cifra de 184 507 fallecidos el
día uno de junio del 2021, representando esta cifra más de dos veces y media de
las cifras que se estuvieron dando oficialmente en forma diaria desde el año
pasado. La tasa de letalidad igualmente pasó de 3,54% a la cifra de 9,40%, la
misma que representaba entre 9 a 10 muertos por cada 100 pacientes infectados con
la SARS-CoV-2. La tasa de letalidad se refiere al número de fallecidos por cada
100 infectados o enfermos.4 Estas cifras representaban una de las tasas de
mortalidad más altas en el mundo por 100 000 habitantes y el Perú se ubicaba en
ese momento en el quinto país en el mundo con mayor número de defunciones
después de Estados Unidos de Norteamérica, Brasil, India y México, países que tienen
centenares de millones de habitantes en comparación con el nuestro. Este hecho
se debe al mal manejo que se hizo de la pandemia de la COVID-19 desde su
aparición en nuestro país en el mes de marzo del 2020 en relación a las medidas
que se tomaron y a las que debían haberse tomado para contener y mitigar la pandemia.
La cifra de fallecidos totales a fines del mes de octubre del presente año era
de 200 276, representando una tasa de letalidad del 9,1% o sea 9 fallecidos por
cada 100 pacientes infectados.
REFERENCIAS
BIBLIOGRÁFICAS
1. Sala
situacional. Centro Nacional de Epidemiología y Control de Enfermedades. MINSA,
Perú; 2020.
2. Beaglehole R, Bonita R
& Kjellstrom T. Basic Epidemiology,
2nd edition. PAHO,WHO. 2008
3. Norman GR and Streiner DL. Biostatistics. The Bare Essentials. 4th Edition. People’s Medical
Publishing House. 2014.
4. Petrie A and Sabin
C. Medical Statistics at a Glance.
Fourth edition. Wiley
Blackwell. 2020.
Internista e infectólogo, FACP. Presidente de la Sociedad
Peruana de Medicina Interna,
Lima, Perú.
Gutiérrez-Tudela JW. La pandemia de la COVID-19 en el Perú:
análisis epidemiológico de la segunda ola. Rev Soc Peru Med
Interna. 2021;34(4):129-130. DOI: https://doi.org/10.36393/spmi.v34i4.627